22-IV-2012. MIÉRCOLES DE CENIZA

Lecturas: Jl 2, 12-18; 2Co 5,20 - 6,2

Salmo Responsorial: Sal 50, 3-6.12-17
R/. "Misericordia, Señor: hemos pecado".

Evangelio
Dijo Jesús a sus discípulos: "Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos, de lo contrario, no tendréis recompensa de vuestro Padre celestial. Por tanto, cuando hagas limosna, no vayas tocando la trompeta por delante, como hacen los hipócritas en las sinagogas y por las calles, con el fin de ser honrados por los hombres; os aseguro que ya han recibido su paga. Tú, en cambio, cuando hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha; así tu limosna quedará en secreto, y tu Padre, que lo ve en secreto, te lo pagará. Cuando recéis, no seáis como los hipócritas a quienes les gusta rezar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las plazas, para que los vea la gente. Os aseguro que ya han recibido su paga. Tú, cuando vayas a rezar, entra en tu aposento, cierra la puerta y reza a tu Padre, que está en lo escondido, y tu Padre, que ve en lo escondido, te lo pagará. Cuando ayunéis, no andéis cabizbajos, como los hipócritas que desfiguran su cara para hacer ver a la gente que ayunan. Os aseguro que ya han recibido su paga. Tú, en cambio, cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara, para que tu ayuno lo note, no la gente, sino tu Padre, que está en lo escondido; y tu Padre, que ve en lo escondido, te recompensará".

Mateo 6, 1-6.16-18

Cita
Ofreceos como un sacrificio vivo, santo, agradable a Dios. (Rm 15,1)

Reflexión
Bienvenidos a la Cuaresma. El Miércoles de Ceniza oímos un llamado a poner en orden nuestra vida. Isaías nos dice, "Enluten su corazón...Vuélvanse al Señor." San Pablo habla como embajador de Cristo, pidiendo que "se reconcilien con Dios...ahora es el día de la salvación". Jesús no da medios prácticos para poner en orden la vida.
Antes de explicar esos pasos, quisiera decir algo sobre el momento en que estamos viviendo, y por qué es tan importante poner en orden la vida, ahora. Somos como un hombre despertándose después de una borrachera de veinticinco años. Tenemos dolor de cabeza, un sentido de desorientación, a causa de la crisis global de la economía. No voy a proponer un remedio, pero puedo decir ésto: Si tú y yo ponemos en orden nuestra relación con Dios, las otras cosas encontrarán su lugar corrrecto.
Cualquier problema económico que tenemos, cualquier problema familiar, cualquier problema parroquial... todos son problemas espirituales. Si damos a Dios el primer lugar en nuestras vidas, las otras cosas se corregirán. Jesús nos habla hoy de ayuno, oración y limosna. ¿Por qué? No para que la gente nos admire, sino para tener la relación correcta con nuestro Padre.
Hoy, Miércoles de Ceniza, les invito a hacer un compromiso de tiempo a Dios. Algunas cosas son muy básicas: Misa dominical, oración personal, oración antes de comer y oración con la familia. Esto es catolicismo básico y espero que todos los marquen. Si hacen esas tres cosas: misa dominical, oración personal diaria y oración familiar... cambiará su vida. Más allá de ésto, hay otras sugerencias: rezar el rosario, hacer una novena (nueve días) de oración, asistir a una clase de educación religiosa o hacer un retiro.
Quisiera decirlo otra vez: Si haces un compromiso de tiempo al Señor, si le das el primer lugar en tu vida, todo lo demás caerá en su lugar propio.
No desperdiciar la crisis. Es el momento de poner en orden la vida. Quizás en adición a la crisis financiera, estás enfrentando una crisis familiar o de salud. No perder la calma. Es un llamado de Dios. Ahora es el tiempo favorable. Ahora es el día de la salvación. Es el momento de ordenar las prioridades, es el momento de dar primer lugar a Dios. Bienvenidos a la Cuaresma.

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